
Edwin Loor Andrade, Wilmer Barrera Yayes
1. INTRODUCCIÓN
En el año 1922 el matemático Polaco S. Banach introdujo uno de los resultados más importantes en
la teoría métrica del punto fijo, conocido hoy día como el principio de contracción de Banach, (P.C.B)
ver Cárdenas y Gutierrez (2008). Su importancia radica en la gama de aplicaciones que ha tenido en
áreas de las matemáticas y otras ciencias.
Desde su aparición se ha publicado una gran cantidad de generalizaciones o extensiones con di-
versos enfoques, tal es el caso de G. Jungck, quien en 1976 encuentra condiciones sobre un par de
funciones a fin de garantizar existencia y unicidad de punto fijo en común, ver Vujaković y cols.
(2020). Este aporte permite ver el principio de contracción de Banach como caso particular.
La Teoría del Punto Fijo es una de las herramientas más fuertes y fructíferas de las matemáticas
modernas y puede ser considerada un tema central del análisis no lineal. Muchos matemáticos como
Cauchy, Liouville, Lipschitz, Peano y Picard han dado su aporte en el estudio del mismo, y en las
últimas 5 décadas, la teoría de punto fijo ha tenido suficientes contribuciones al estudio e investigación
del mismo ver Vandana (2017).
Por lo anteriormente expuesto se ha trabajado sobre la creación de condiciones que permita garan-
tizar la existencia y unicidad de punto fijo en común para un par de funciones.
En el año 1962, E. Rakotch generalizó el principio de contracción de Banach, al sustituir la cons-
tante de contracción por una función monótona decreciente, α : R
+
→ [0, 1) ver Rakotch (1962).
A partir de 1976, se introduce un resultado muy importante en la teoría métrica del punto fijo, el
cual establece condiciones suficientes que garantizan la existencia y unicidad de punto fijo en común
para un par de aplicaciones ver Vujaković y cols. (2020). Este resultado establece lo siguiente:
Sean (X, d) un espacio métrico completo y f, g : X → X dos aplicaciones tales que, g(X) ⊂ f(X),
f conmuta con g, f es continua y existe α ∈ [0, 1) tal que:
d(g(x), g(y)) ≤ αd(f (x), f (y)), ∀x, y ∈ X.
Entonces existe un único z ∈ X tal que f (z) = g( z) = z.
Este resultado se conoce como el teorema de punto fijo de Jungck ver Cárdenas y Gutierrez (2008).
Durante los siguientes años aparecen otras condiciones que generalizan el concepto de conmutati-
vidad, tales como: funciones débilmente conmutativas, funciones compatibles, funciones débilmente
compatibles, entre otros y, de esta forma se tienen nuevos resultados de punto fijo en común para dos
funciones a través de los aportes de Jungck (1976), Koierngi y cols. (2018), Rhoades y cols. (1984) y
Morales y Rojas (2012b).
Definición 1. (Pata (2019)). Sean X un conjunto no vacío y f : X → X una función. Un elemento x
en X es un punto fijo de f , si f (x) = x.
Se denota por F
f
al conjunto de todos los puntos fijos de una función f .
No todas las funciones tienen punto fijo, para lo cual se considera la función f (x) = x+1, definida
sobre R. Si x es un punto fijo de f, entonces
x = x + 1.
Dado que lo anterior no se cumple para ningún valor x ∈ R, se concluye que f no tiene punto fijo.
En la teoría métrica del punto fijo, el objetivo es estudiar las condiciones de las funciones invo-
lucradas y/o el espacio de definición para garantizar existencia y unicidad de punto fijo. Uno de los
pioneros en esta área fue Banach, con el principio de contracción.
186 ISNN 2588-0764 REVISTA BASES
DE LA CIENCIA