
Revista Cognosis. Revista de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación ISSN 2588-0578
Los entornos virtuales y el aprendizaje de ortografía en los estudiantes del 4to año de Educación General Básica
Vol. VII. Año 2022. Número 2, abril-junio
servicio del aprendizaje ortográfico en particular y de la mejora de las
capacidades comunicativas de comprensión y expresión en general, sino como
un mero procedimiento de evaluación del rendimiento ortográfico alcanzado,
para controlar el número de palabras escritas erróneamente.
Para Villarroel (2025) “Los contenidos de la enseñanza de la ortografía han
venido insistiendo en su aprendizaje memorista de reglas, así como en la
realización de dictados que, más que un instrumento al servicio del aprendizaje
ortográfico, sólo han servido para controlar el número de palabras
erróneamente escritas” (p123. En este sentido, equivocadamente se ha creído
que la ortografía se aprende solo cuando los estudiantes memorizan sus reglas
y no es así, porque la práctica ha demostrado que existen otras formas muchos
más interesantes y significativa que el estudiante y las personas, de manera
general, tengan una mejor orografía al escribir un texto.
En esta situación, los teóricos de los entornos de aprendizaje Adel y Castañeda
(2015) argumentan que Los entornos virtuales que tienen que ver con el
proceso o actividad de enseñanza-aprendizaje, que se desarrolla fuera de un
espacio físico, temporal, a través de Internet que ofrecen diversidad de medios y
recursos para apoyar la enseñanza; son en la actualidad la arquitectura
tecnológica que da sustento funcional a las diversas iniciativas de
teleformación, no obstante; ellos no determinan los modelos y estrategias
didácticas, ya que el conocimiento o acceso a estos recursos no exime al
profesor del conocimiento profundo de las condiciones de aprendizaje, ni del
adecuado diseño y planeación docente, pero sí le aporta una nueva visión
pedagógica que se enriquece con el uso de estas tecnologías; es decir los
entornos virtuales pueden ayudar a mejorar el aprendizaje pero en ningún
momento reemplaza al docente.
Es decir que, los entornos virtuales aportan con nuevos recursos tecnológicos
visuales entre otros y que llaman poderosamente la atención de los estudiantes,
pueden contribuir a un buen aprendizaje de la ortografía con la mediación del
docente; de esta manera se superaría los métodos tradicionales cuyos
resultados no han sido los más adecuados. Es por ello, que se ha orientado la
búsqueda hacia aspectos pedagógicos, tecnológicos, de uso y evaluación que
incentive a los profesores para aceptar el reto de aplicar las teorías modernas
socioculturales del aprendizaje integradas a la virtualidad, que generan nuevos
contextos o ámbitos de aprendizaje desde una estructura de acción tecnológica,
que posibilitan nuevos ambientes de aprendizaje.
DESARROLLO
Uno de los grandes problemas en la enseñanza es la cantidad de faltas de
ortografía de los estudiantes. No hay discusión en este punto, una buena
ortografía es la base de un texto bien escrito y se ha de tener en cuenta que, en
la mayoría de las ocasiones, las personas se comunican por escrito.
Así pues, el problema de la ortografía no es tan sólo un problema escolar, va
más allá, pertenece a la vida: cartas, currículo, solicitudes, instancias, trabajos