
María Karina Solórzano Zambrano, Tania Miladi Zambrano Loor
Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación. Universidad Técnica de Manabí. ECUADOR.
Evidentemente el teatro estimula diversas habilidades, entre ellas las creativas,
sociales y cognitivas, las cuales favorecen el desarrollo integro de los niños y
niñas.
El arte dramático aplicado desde la pedagogía, con las técnicas teatrales como
expresión corporal, mímica, relajación, expresión oral, representación
dramática y los elementos necesarios, tales como texto, montaje y técnica
aporta favorablemente en el desarrollo holístico de los niños y niñas, por tal
motivo se debe de considerar como herramienta fija y fundamental en el
planteamiento de los contenidos en el nivel inicial.
Respecto a la entrevista aplicada, se concreta que el arte dramatico es
especialmente importante en la educación infantil y en el desarrollo integral de
la personalidad de los niños y niñas, porque pone en funcionamiento e implica
las distintas dimensiones, creando seres autónomos, creativos, sensibles,
colaborativos, expresivos, permitiéndoles desenvolverse de mejor manera en el
medio que los rodea.
Peñafiel (2018) menciona que:
El modelo pedagógico teatral se ha caracterizado por ser un recurso de
aprendizaje, motivador de la enseñanza, facilitador de la capacidad expresiva, y
suministrador de la experiencia creativa. Es así como el arte de actuar o
simular contextos, consiente estructurar un soporte significativo, para
conseguir el objetivo meta, trasformar esa educación en una “educación
creativa, contextualizada, crítica y propositiva. (p.4)
La pedagogía teatral como recurso de aprendizaje logra en los niños y niñas el
desarrollo holístico de destrezas y habilidades, convirtiendo la educación en
una “educación creativa, contextualizada, crítica y propositiva.
CONCLUSIONES
El arte dramático es una herramienta fundamental que favorece al desarrollo
de habilidades y destrezas en los niños y niñas del nivel inicial, puesto que
despierta en ellos la creatividad, sensibilidad, espontaneidad y otras formas de
expresión, el niño encuentra satisfacción emocional ya que le permite
relacionarse con sus pares aprendiendo a trabajar en equipo, desarrollando
todas sus habilidades motoras, sociales y emocionales. Por tanto, los docentes
deben fomentar prácticas idóneas en sus clases para desarrollar estas
habilidades y destrezas.
Mediante la aplicación de estrategias metodológicas lúdicas como el juego
dramático, pantomima, danza creativa, representación de títeres, teatro,
empleadas en el arte dramático, los docentes desarrollan el área cognitiva,
socio-afectiva, lingüística, motriz y la identidad y autonomía, aportando en la
formación integral de los niños y niñas, estimulando las esferas de la
creatividad y la imaginación y evidenciando cambios positivos al momento de
enfrentar al mundo de manera independiente y segura.