diversos factores que posibilitarán en una u otra medida, el mayor o menor
desarrollo de esta. Atendiendo a lo mencionado, al fortalecer el pensamiento
creativo desde el ámbito educativo se proporciona en los estudiantes elementos
valiosos para enfrentar y solucionar problemas en los cuales se pongan a
prueba no solamente los conocimientos, sino también las habilidades, haciendo
que los desempeños en los diversos aspectos de la vida sean más efectivos
(Ramírez Sánchez, 2014).
El pensamiento creativo tiene cuatro componentes principales: Fluidez: “Hace
referencia a la cantidad de ideas que puede hallar alguien sobre un tema
determinado” (Guilford, 1994, p. 34); flexibilidad: “Entendida como la variedad
y la heterogeneidad de las ideas que se expone” (Guilford, 1994, p. 34);
elaboración: “Es el nivel de detalle de desarrollo o complejidad de las ideas
creativas.” (Guilford, 1994, p. 34); originalidad: “Se basa en la rareza de la
respuesta” (Rodríguez, 1985, p. 124) (Benitez et al., 2013).
Escobar (2003) define a la estimulación de la creatividad como “…una serie de
experiencias que, de forma vivencial, se ofrecen al niño para activar todas las
áreas que integran su desarrollo a fin de impulsar sus potencialidades” (p. 67).
De manera que se desarrollen en forma integral todas las potencialidades
infantiles, entre ellas las intelectuales, afectivas, psicomotrices, lingüísticas,
sociales, sexuales, morales y físicas (Delia & Amado, 2020).
Por otro lado, la creatividad según Castro (2005), “es una facultad específica del
ser humano que le permite crear con originalidad, flexibilidad y fluidez un
conjunto de valores materiales y conocimientos nuevos con el propósito de
satisfacer necesidades personales y sociales” (p. 37). Es decir, que es
considerada como una función cognitiva característica de todo niño, pero debe
ser estimulada para que se desarrolle. Es por tal razón que el docente de
Educación Inicial debe conocer el acto creador, su proceso y sus
características, así como utilizar los aspectos de la vida o rutina diaria del niño
en la institución, para que desarrolle todo su potencial, a partir de su vida
afectiva y emocional para el desarrollo de su pensamiento creativo (Delia &
Amado, 2020).
La creatividad requiere para ser mucho más elaborada, mucho más válida,
mucho más loable de tres elementos: la memoria, la inteligencia y la
creatividad. Es decir, cuando se tiene buena memoria, excelente inteligencia y
hay una creatividad desbordada, se tiende a ser genio o se es genio. Sin
embargo puede existir el caso de una persona que solamente tiene creatividad,
muy poca inteligencia y nada de memoria(V, 2012).
Estrategia educativa
En lo que concierne a la educación existen diferentes estrategias, métodos,
técnicas y otros que tienen la finalidad de apoyar el proceso educativo; en ese
sentido, diferentes autores han desarrollado investigaciones y estudios de esta
temática. En consideración a diferentes concepciones y abordajes, para el
investigador la estrategia educativa es un procedimiento (conjunto de acciones)