Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
160
GESTIÓN Y PRIORIDADES GEOGRÁFICAS POR SECTORES EN MANABÍ
PARA MEJORAR LA SEGURIDAD ALIMENTARIA Y DESARROLLO
MANAGEMENT AND GEOGRAPHICAL PRIORITIES BY SECTORS IN
MANABÍ TO IMPROVE FOOD SECURITY AND DEVELOPMENT
Código Clasicación JEL: H51, O15, J68, O21, R11
RESUMEN
La inadecuada gestión de recursos nancieros y económicos para disminuir la
vulnerabilidad de la Seguridad Alimentaria en las zonas geográcas manabitas, es una de
las prioridades a ser tratadas por autoridades de niños sub-nutridos, para distribuir estos
recursos, existe una insuciente capacidad de gestión local. La Seguridad Alimentaria
es un fenómeno complejo y multidimensional; la metodología utilizada es de tipo
descriptivo, comparativo y correlacional, con variables planteadas en trabajos de Smith/
Haddad 2000 y UNICEF 1990, cuyos factores principales son: alimentos, ingresos,
infraestructura, agua, saneamiento, salud y educación. El objetivo principal es establecer
las prioridades de actuación para mejorar el estado nutricional y promover el desarrollo de
Manabí. Se ha medido factores determinantes de la vulnerabilidad cantonal, la gravedad
del problema de cuánta gente la padece y su capacidad de respuesta. Para resolverlo se
plantea una adecuada gestión de prioridades geográcas y sectoriales, principalmente de
recursos nancieros de las instituciones competentes.
Palabras clave: Gasto público, desarrollo humano, política pública, políticas de
planicación, desarrollo.
ABSTRACT
The inadequate management of nancial and economic resources to reduce the
vulnerability of food security in the geographical areas of Manabies, is one of the
priorities to be addressed by authorities of under-nourished children, to distribute
these resources, there is an insufcient local management capacity. Food Security is
a complex and multidimensional phenomenon; the methodology used is descriptive,
comparative and correlational, with variables presented in Smith / Haddad 2000 and
UNICEF 1990, whose main factors are: food, income, infrastructure, water, sanitation,
health and education. The main objective is to establish priorities for action to improve
nutritional status and promote the development of Manabí. Factors that determine the
cantonal vulnerability, the severity of the problem of how many people it suffers and
its responsiveness have been measured. In order to solve this problem, an adequate
management of geographic and sectorial priorities is proposed, mainly of nancial
resources of the competent institutions.
Key words: Public spending, human development, public policy, planning, development.
Ana Afonso Gallegos
ana.afonso.gallegos@gmail.com
Universidad Politécnica de Madrid
Carlos Monar Merchán
carlos.monar@gmail.com
Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí
de Manta - Ecuador
Viviana Montalvo Gutiérrez
vmontalvo@ups.edu.ec
Universidad Politécnica Salesiana de
Cuenca - Ecuador
Recibido: 18/07/2016 Aceptado: 04/12/2016
161
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
INTRODUCCIÓN
Las teorías de desarrollo se han preocupado de estudiar las potenciales fuentes de
crecimiento y cómo pueden ser integradas en un proceso de transformación que produzca
mejoras continuadas en el nivel de vida.
Durante mucho tiempo la preocupación ha sido: ¿cuánto está produciendo
un país? Ante esta preocupación se habla de desarrollo económico y para evaluarlo se
recurre a indicadores de renta. Aun siendo una medición especíca de rendimiento de
mercado, el PIB a menudo se confunde con una medida amplia de bienestar (Stiglitz et
al.2009).
A partir de los años noventa, en los debates sobre políticas y desarrollo
económico se reconoce que el desarrollo es algo más que el crecimiento material y que
debe tener objetivos más amplios relativos al bienestar humano. A partir de la década de
los noventa, y cada vez con más frecuencia, la pregunta que se hace es: ¿cómo le va a
las personas? Ya no se pregunta ¿cuánto tienes?, sino ¿cómo te va? La razón principal
para este cambio es el creciente reconocimiento de que el objetivo real del desarrollo es
ampliar las opciones de las personas (Mahbub ul Haq, 1995). A partir de entonces surge
el concepto de desarrollo humano. El Índice de Desarrollo Humano mide el bienestar
mediante un índice complejo que considera tres dimensiones: longevidad, acceso a
conocimientos y estándar de vida (UNDP, 1990).
La medición del desarrollo humano pasa por alto un n fundamental de
desarrollo como es la seguridad alimentaria. Esto constituye una base errónea para
posteriores decisiones: los indicadores con los que se mide el bienestar inuyen en las
decisiones que se toman; si las medidas no son adecuadas, las decisiones que se toman
tampoco lo son (Stiglitz et al.2009).
El objetivo de todos los indicadores es ayudar a los tomadores de decisiones
(Radermacher, 2010). De esto se desprende que un indicador está vinculado a un objetivo
especíco, y guía futuras actividades en este ámbito. Donde hay inseguridad alimentaria
no se puede hablar de bienestar. No puede haber bienestar en una familia en la que los
niños están desnutridos, no se puede hablar de estado del bienestar en un país en el que
la mitad de los niños, o un cuarenta, o un treinta por ciento de los niños estén desnutridos
(Afonso Gallegos, 2008). La desnutrición es un gran impedimento en la capacidad de un
país para desarrollarse económica, social y políticamente (OMS, 1997).
La desnutrición crónica es un problema que merece especial atención en
Ecuador. La desnutrición infantil, que afecta a casi uno de cada cuatro niños menores de
cinco años y causa una reducción irreversible en su rendimiento escolar y en su futuro
rendimiento laboral, puede bajar sustancialmente mediante un conjunto integrado de
políticas adecuadas y como meta se propone reducir su prevalencia en un 40% hasta
2030 (PNBV, 2012).
La desnutrición infantil es resultado de una combinación de factores entre los
que se incluyen la falta de alimentos adecuados en términos de cantidad y calidad; el
acceso a agua, saneamiento y servicios de salud inadecuada; y unas prácticas inadecuadas
de alimentación y cuidados recibidos por los niños. Hasta que no se mejoren aquellos
factores que se han identicado como principales causas de la desnutrición infantil el
progreso será limitado (UNICEF, 1990; UNICEF, 2010, UNICEF, 2015; Smith and
Haddad, 2000).
El objetivo de este artículo es establecer prioridades de actuación para mejorar
el estado nutricional y promover el desarrollo en la provincia de Manabí. Para ello
se mide la gravedad del problema de desnutrición en la provincia de Manabí a escala
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
162
parroquial, teniendo en cuenta el número de niños que la padecen y la capacidad de
respuesta de cada parroquia para resolver el problema. El método de medida permite
también establecer prioridades para la localización de recursos tanto sectoriales como
geográcos.
Este artículo tiene como referencia principal un artículo anterior de Afonso et.al
(2011) en el que se hace un análisis equivalente a escala de países y cuyo objetivo es
establecer una metodología de priorización de países para ayudar a los tomadores de
decisiones a distribuir recursos para resolver el problema de la desnutrición a escala
mundial.
El problema: La desnutrición en Manabí.
¿Cómo medirlo?
Para medir la seguridad alimentaria en el mundo se han propuesto distintos indicadores.
Pero el progreso hacia el Objetivo del Milenio de reducir a la mitad el hambre para
el 2015 se mide por dos únicos indicadores (Millennium Project, 2000): el indicador
de FAO que es una estimación de población que tiene acceso a menos kilocalorías del
mínimo necesario para una vida saludable (Mernies, 2003); y el indicador de UNICEF
que mide la prevalencia de niños con bajo peso y es una estimación de la proporción
de niños menores de cinco años que tienen un peso insuciente para su edad (Onis and
Blössner, 2003).
La proporción de niños con bajo peso es una medida del estado nutricional de
los niños porque el décit en la nutrición o los problemas de salud (que a su vez derivan
frecuentemente de la nutrición inadecuada) se reejan en un menor crecimiento. Por ello,
el crecimiento de los niños es un indicador directo del estado nutricional de los niños y
un indicador indirecto del estado nutricional de la población en su conjunto (Onis and
Blössner, 2003).
Mientras que el indicador de FAO solo tiene en cuenta la cantidad de alimentos,
sin tener en cuenta la calidad, el indicador de UNICEF puede reejar otras aspectos de la
nutrición (Smith and Haddad, 2001).
El indicador de bajo peso para la edad (P/E) engloba dos dimensiones: bajo
peso por altura (P/H) o Insuciencia ponderal que es reejo de desnutrición aguda;
y baja altura por edad (H/E) o Retraso en el crecimiento que, a su vez, es reejo de
desnutrición crónica. El indicador de retraso en el crecimiento, en particular, es un
síntoma irreversible de desnutrición y por ello los avances en desnutrición crónica no se
observan a corto plazo. Por el contrario, la insuciencia ponderal es un indicador más
sensible y las mejoras se muestran de modo más inmediato (FAO, 2013).
Tanto la prevalencia de retraso en el crecimiento y como la de insuciencia
ponderal en niños menores de cinco años ha descendido en todos los países en desarrollo
desde el año 1990, lo cual indica una mejora en la nutrición como resultado de una mayor
disponibilidad de alimentos. Pero el progreso en la reducción de retraso en el crecimiento
ha sido menor (FAO, 2013).
La incidencia de la desnutrición crónica es mucho mayor que la de la desnutrición
aguda. El hambre crónica es la situación cotidiana y normal de muchas personas. Por ser
un fenómeno constante es un fenómeno silencioso y frecuentemente olvidado (Afonso
Gallegos, 2008). Actualmente existe una demanda internacional hacia la atención que
se debe prestar a quienes padecen desnutrición crónica (Trueba y MacMillan, 2011). En
las discusiones que se están llevando a cabo de cara a la elaboración de la Agenda Post-
2015, en la que se jarán los objetivos, metas e indicadores que han de regir la estrategia
de desarrollo mundial a partir del año 2015, hay un acuerdo generalizado de reemplazar
Gestión y Prioridades Geográcas por Sectores en Manabí para Mejorar la Seguridad Alimentaria y Desarrollo
163
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
el indicador de bajo peso para la edad por el de retraso en el crecimiento, por ser este
un indicador de desnutrición crónica (FAO y PMA, 2013). Para evaluar la situación de
seguridad alimentaria en la provincia de Manabí, en este artículo se presta atención al
indicador de desnutrición crónica infantil.
¿A cuántos afecta y dónde se localiza?
Las Parroquias de Manabí se pueden clasicar de acuerdo a la gravedad del problema
de la desnutrición. Pero para ello es necesario decidir el criterio en el que basar dicha
clasicación. La intención es priorizar aquellos lugares donde viven la mayor parte de
las personas que padecen desnutrición. Frecuentemente, los mapas muestran los lugares
en los que la incidencia (porcentaje) es mayor, pero no los lugares en los que hay mayor
número de desnutridos. En este estudio se pretende priorizar áreas de intervención para
distribuir recursos. Consecuentemente, el dato importante no es el porcentaje sino el
número. El argumento aquí es que a la hora de distribuir recursos se debe prestar más
atención a las parroquias donde viven la mayor parte de los niños con desnutrición de la
provincia.
En la tabla 1 se muestra una comparación entre la concentración de la desnutrición
entre las cinco parroquias de Manabí donde el problema es mayor clasicadas por
porcentaje y por número de personas sub-nutridas.
Tabla 1: Concentración de la desnutrición. Comparación
entre las cinco primeras parroquias de Manabí clasicadas por
porcentaje y por número de niños desnutridos
Fuente: Elaboración propia. Datos: Consejo Provincial de Manabí 2006
En la tabla 2 se incluyen las 75 unidades censales de la provincia de Manabí (22
cantones y 53 parroquias). El orden en que aparecen hace referencia a la población con
desnutrición crónica. La clasicación se ha hecho extrapolando el porcentaje de niños
con desnutrición crónica (según el indicador de retraso en el crecimiento) a la población
total. La cifra resultante, que se ha llamado desnutrición crónica, no es una medida, ya
que ha sido estimado a partir de datos no actualizados y referidos sólo a la población
menor de cinco años. La cifra de desnutrición crónica es sólo un indicador que reeja la
“cantidad del problema” y sirve para hacer una clasicación pero no se deben considerar
unidades de medida.
Cinco
primeras
parroquias
% de niños
desnutridos
Nº de niños
desnutridos
% de niños
desnutridos
respecto a la
población total
Clasicación
por porcentaje
Barraganete,
Jaramijo, 10
de agosto, La
unión, Julcuy
41% 1758 4%
Clasicación
por número
Manta,
Portoviejo,
Chone, El
Carmen,
Jipijapa
29% 18396 48%
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
164
Tabla 2: Desnutrición en Manabí por parroquia
*Extrapolación del porcentaje de niños con bajo desnutrición crónica a la población total
Fuente de los datos: Consejo Provincial de Manabí, 2006
METODLOGÍA
Con el n de explicar la situación de las parroquias situadas en la primera mitad de la
tabla 2 requieren una atención especial, se utiliza las estadísticas y sus correspondientes
estadígrafos, por ejemplo: Extrapolación del porcentaje de niños con bajo desnutrición
crónica a la población total. Pero para distribuir recursos los tomadores de decisiones
deben considerar otros aspectos además de la “cantidad del problema”. La capacidad
de respuesta que tiene cada parroquia para resolver la situación es también importante.
La vulnerabilidad es la susceptibilidad de ser herido, perjudicado o dañado. El
concepto de vulnerabilidad expresa la variedad de amenazas de origen multidimensional
y presta atención a las relaciones totales entre ellas en una determinada situación social
que constituyen una condición tal, que combinada con factores del entorno, origina una
catástrofe (Bankoff et al. 2004).
La vulnerabilidad es el grado en que un sistema es susceptible a los efectos
adversos. Matemáticamente, la vulnerabilidad se puede expresar como el riesgo menos
la capacidad de respuesta (Afonso, et.al., 2011). Cuanto mayor sea el riesgo y menor
la capacidad de respuesta, mayor es la vulnerabilidad. El riesgo es la probabilidad
de que se materialice una amenaza. En el contexto del análisis que se lleva a cabo en
este artículo, el riesgo no es realmente un riesgo (potencial), sino un hecho real (la
desnutrición crónica) y por tanto su probabilidad es igual a uno. Las capacidades de
respuesta son multidimensionales y están relacionadas con las causas de la desnutrición
crónica (Afonso et.al., 2011).
El estado nutricional está condicionado por la seguridad alimentaria de los
hogares, la calidad de los cuidados recibidos, y la sanidad del entorno. Es decir, que para
un buen estado nutricional, además de tener acceso a alimentos sucientes en calidad y
cantidad es importante la forma en que estos alimentos se almacenen, y que se cocinen en
condiciones óptimas de conservación e higiene. El accesos a agua potable, sana y segura
Nombre de la
Parroquia
% de niños con retraso
en el crecimiento
Desnutrición crónica*
Manta 31 69454
Portoviejo 29 63646
Chone 28 21086
El Carmen 27 21029
Jipijapa 31 15106
Montecristi 22 14722
Pedernales 34 11481
Calceta 29 9730
Jaramijó 41 7598
Bahía de Caráquez 29 7520
Tosagua 27 7520
Charapotó 31 6299
Rocafuerte 18 5994
Santa Ana de vuelta larga 25 5546
Gestión y Prioridades Geográcas por Sectores en Manabí para Mejorar la Seguridad Alimentaria y Desarrollo
165
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
es crucial para una alimentación saludable (FAO, 2013).
La Figura 1 ilustra los diferentes factores que condicionan el estado nutricional.
A la luz del marco conceptual de la gura 1, se pueden identicar indicadores relacionados
con cada una de las causas del estado nutricional. Estos indicadores se pueden utilizar
para medir los recursos con los que cuenta cada parroquia para resolver el problema, es
decir, las capacidades de respuesta.
Existen variedad de datos estadísticas ociales con los que medir o evaluar cada
una de las variables que aparecen en la gura 1 a escala de países. En ocasiones, estas
estadísticas se encuentran también a escala sub-nacional: regional o provincial. Pero hay
dicultad en encontrar estadísticas desagregadas a escala sub-provincial.
Figura 1 Marco conceptual de los determinantes del estado nutricionañ
Fuente: Smith y Haddad 2000; y UNICEF 1990
En el caso de la provincia de Manabí se pueden seleccionar estadísticas a
escala parroquial (o cantonal en su defecto) que estén relacionadas con las variables a
evaluar, en ocasiones de modo indirecto, pero que indican tendencias y que permiten
hacer comparaciones entre parroquias de los avances alcanzados respecto a distintas
dimensiones del desarrollo.
RESULTADOS
De los indicadores expuestos en la metodología, aquellos que se aplican para el caso
de las Parroquias Rurales y Urbanas de la Provincia de Manabí, dan como resultados
aquellos que se listan en la tabla 3; que son los indicadores para medir la capacidad de
respuesta se expresan en forma de índices (tal y como se describe en la tabla 3) que a su
vez se obtienen a partir de variables explicativas utilizando la fórmula general.
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
166
Índice = (valor – mínimo) / (valor objetivo – mínimo).
Cada índice se obtiene a través de una función de valor. Las funciones de valor
son una representación matemática de los juicios humanos, ofreciendo una descripción
analítica del sistema de valores (en este caso las variables explicativas) en decisiones
complejas (Beinat, 1997).
Tabla 3: Indicadores para medir las capacidades de respuesta
Gestión y Prioridades Geográcas por Sectores en Manabí para Mejorar la Seguridad Alimentaria y Desarrollo
167
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
Para la aplicación de la fórmula anterior con la cual calcular los índices se
requiere el establecimiento de valores de referencia o valores objetivo. Los valores de
referencia se incluyen en la tabla 4.
Tabla 4: Valores de referencia para el cálculo de los índices
Elaboración: Autores. Ene/2015
Los nueve índices se agrupan en cinco clases de estrategias de capacidad de
respuesta: renta, educación, salud, sanidad y económica-ambiental. Para cada clase
de estrategia de capacidad de respuesta, se calcula un índice como media de sus
componentes. De este modo, los nueve índices de la tabla 4 se transforman en cinco
tal y como se ilustra en la tabla 5. La media de los cinco nuevos índices es el Índice de
Capacidad de Respuesta Global para cada país.
Tabla 5: Índices de Capacidades de Respuesta y sus componentes
Elaboración: Autores. Ene/2015
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
168
Distribución de los recursos
La vulnerabilidad para cada país se calcula a través de la siguiente formula:
Vulnerabilidad = 1 – Media de los Índices de Capacidades de Respuesta
Que se puede expresar de la siguiente manera:
V= 1- 1/5*(IR+ID+IS+IH+IEA).
Multiplicando la cantidad de desnutrición (Q), estimado extrapolando el número
de niños con desnutrición crónica (baja altura por edad) al conjunto de la población
(datos de la última columna de la tabla 2), por la vulnerabilidad, (V), se obtiene una
cifra (Q*V) que indica la gravedad del problema. Este número se puede utilizar para
establecer un ranking de parroquias para la distribución de recursos y determinar el
porcentaje de recursos que atribuir a cada parroquia. Las 22 parroquias que encabezan
el ranking al aplicar los cálculos descritos se listan en la tabla 6. En la tabla también se
incluye la Vulnerabilidad y los Índices relativos a las capacidades de respuesta.
Tabla 6: Distribución de recursos
DISCUSIÓN
Prioridades geográcas identicadas
En todas las parroquias de Manabí está presente el problema de la desnutrición y
requieren atención para resolver el problema. Pero se pueden establecer niveles de
prioridad clasicando las parroquias en cuatro categorías: prioridad máxima, prioridad
muy alta, prioridad alta y prioridad media. La máxima prioridad corresponde a Manta
y Portoviejo, ya que al ser las localidades más pobladas alojan al mayor número de
Gestión y Prioridades Geográcas por Sectores en Manabí para Mejorar la Seguridad Alimentaria y Desarrollo
169
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
personas desnutridas: de acuerdo con el análisis realizado en este estudio el 18 por ciento
de la desnutrición total de Manabí se localiza en Manta y el 17 por ciento en Portoviejo.
Como la vulnerabilidad en estas localidades es también importante, para mejorar la
ecacia en el uso de los recursos aplicados para resolver el problema de la desnutrición,
en torno a un 21 por ciento de los recursos totales para Manabí se debería aplicar en
Manta y en torno a un 17 por ciento en Portoviejo.
El Carmen, Jipijapa, Montecristi y Chone presentan prioridad muy alta. Las
parroquias clasicadas de prioridad alta son: Pedernales, Calceta. Jaramijó, Tosagua,
Rocafuerte, Charapotó, Sta. Ana de Vuelta Larga, Cojimíes, Jama, Crucita, San Vicente,
Paján, Junín, Puerto López, Sucre, Pichincha, Flavio Alfaro. El resto de las parroquias
están clasicadas como prioridad media. El porcentaje de recursos a distribuir en cada
parroquia aparece en la última columna de la tabal 6 y en la gura 2.
Figura 2: Distribución de recursos (porcentaje) por parroquia
Elaboración: Los Autores. Ene/2015
Prioridades sectoriales identicadas
La dimensión de la renta y de sanidad requiere atención a una escala equivalente en casi
todas las parroquias de Manabí. Pero al examinar los valores de cada uno de los índices
de capacidades de respuesta, se pueden identicar diferentes perles de parroquias
que proporcionan información que puede resultar útil para determinar cuáles son las
principales causas de la desnutrición y denir prioridades sectoriales a escala parroquial.
En la gura 3 se ilustran ejemplos de algunos perles de parroquias.
Figura 3: Perles de parroquias en relación a la capacidad de repuesta
por sector
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº2
170
El principal factor de vulnerabilidad en Pedernales, Jaramijó, Cojimíes, Paján y Pichincha
es la educación (I educación), aunque también se debe prestar atención a la dimensión
de la renta (gráco de la izquierda de la gura 3). Sin embargo, en estas parroquias, se
observa un importante avance en la dimensión económica y ambiental (particularmente
en Pedernales) y en la dimensión de salud (especialmente en Pichincha, Jaramijó y
Cojimíes)
Jipijapa, Rocafuerte y Junín son ejemplos de parroquias que han alcanzado
logros en la dimensión económica ambiental, pero precisan de avances en las otras
dimensiones y en particular en educación y muy especialmente en salud (gráco de la
derecha de la gura 3).
CONCLUSION
Los resultados descritos pueden tener relevancia para el diseño de estrategias para mitigar
la desnutrición. En este artículo se ha hecho un análisis de las causas estructurales que
determinan la vulnerabilidad a la inseguridad alimentaria. Sin embargo, si solo se toman
medidas para acometer las causas estructurales, cuyos resultados se observan a medio y
largo plazo, para muchas de las personas que padecen desnutrición los resultados de tales
medidas llegarían tarde. Por ello, es importante tener en cuenta, además de las causas,
las consecuencias. Además de las medidas destinadas a corregir las causas, es necesario
implementar políticas públicas destinadas a mitigar las consecuencias. Conscientes
de ello, desde el Gobierno Provincial de Manabí se pretende promover una canasta
alimentaria solidaria para complementar la dieta de las familias más vulnerables.
En segundo lugar, es importante señalar, que en este análisis el concepto
recursos hace referencia a cualquier tipo de instrumento que, en caso necesario, se podría
utilizar para lograr lo que se pretende, o a cualquier grupo de elementos disponibles
para una necesidad particular o para llevar a cabo un proyecto. Esto incluye varios tipos
de recursos, aparte de recursos nancieros. En algunas casos, la relación entre nivel
de atención y de esfuerzo y recursos nancieros puede ser bastante débil. Algunas de
las dimensiones de vulnerabilidad a resolver requieren más nanciación que otros. El
argumento es donde localizar políticas, esfuerzo y atención. Para la distribución de
recursos nancieros sería necesario un análisis más detallado tomando en consideración
otros factores que no se han tenido en cuenta en este artículo.
Finalmente, es también oportuno añadir una reexión a más del origen de los
recursos nancieros y económicos. Puede haber casos en que las parroquias cuenten con
recursos propios para reducir la vulnerabilidad, mientras que en otras ocasiones puede
ser necesario la movilización de recursos económicos del gobierno provincial. También,
el destino de los recursos económicos y nancieros, deben ser asignados mediante una
propuesta técnica como la descrita en esta investigación. Los agradecimientos por el
apoyo institucional proporcionado por el Proyecto “Becas Prometeo” de la Secretaría
de Educación Superior de Ciencia y Tecnología de Ecuador, así como del Gobierno
Provincial de Manabí y la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Afonso, A., Trueba, I., Tarancón J. (2011). Counting, scoring and classifying hunger
to alocate resources targeted to solve the problem. Selected Proceedings from the 15th
International Congress On Project Engineering
Gestión y Prioridades Geográcas por Sectores en Manabí para Mejorar la Seguridad Alimentaria y Desarrollo
171
Revista ECA Sinergia. Facultad de Ciencias Administrativas y Económicas. U.T.M. Diciembre 2016 Vol. 7 Nº 2
Afonso Gallegos, (2008). Incidencia de la Seguridad Alimentaria en el Desarrollo.
Análisis y Síntesis de Indicadores. Ed. Entimema.
Bankoff, Greg, George Frerks and Dorothea Hilhorst, (2004). Mapping Vulnerability.
Sterling: Earthscan.
Consejo Provincial de Manabí (2006). Objetivos del Milenio. Estado de la situación
2006.
FAO y PMA, (2013). Hunger, Food Security and Nutrition in the Post-2015 Development
Agenda. Issues Paper for the informal consultation with stakeholders of the Committee
on World Food Security (CFS), to be held on 11th February 2013
FAO, (2013). State of Food Insecurity 2013.
Mahbub ul Haq, (1995). The Birth of Human Development. En: Reections on Human
Development, Capítulo 4, Oxford University Press
Mernies, J., (2003). Measurement of food deprivation. FAO Statistics Division.
Millennium Project, (2000). Millennium Development Goals. Targets and indicators
OMS, (1997). Organización Mundial de la Salud. Health and Environment in Sustainable
Development. Five years after the Earth Summit
Onis, M. and Blössner, M., (2003). The World Health Organization Global Database on
child growth and malnutrition: methodology and applications. International Journal of
Epidemiology (32) 518-526
Radermacher, W. (2010). Measuring Prosperity and Quality of Life Keynote Speech.
Director General of Eurostat
Smith, L.C. and Haddad, L., (2000). Overcoming Child Malnutrition in Developing
Countries: Past Achievements and Future Choices. IFPRI Food, Agriculture and
Environment Discussion Paper. Washington, D.C. (2000).
Stiglitz, J., Sen, A. y Fitoussi, J.P., (2009). Report by the Commission on the Measurement
of Economic Performance and Social Progress
Trueba y MacMillan, (2011). Erradicar el hambre en tiempos de crisis. UPMPRESS.
UNDP, (1990). Informe de Desarrollo Humano. Concept and Measurement of human
development.
UNICEF, 1990. Strategy for improved nutrition of children and women in developing
countries. New York.
_________________________________Ana Afonso, Carlos Monar, Viviana Montalvo