
38 RECUS. REVISTA ELECTRÓNICA COOPERACIÓN - UNIVERSIDAD – SOCIEDAD. UTM – ECUADOR ISSN 2528 - 8075
López Collazo, González Lang, Álvarez Blanco
1. Introducción
Establecidos los fundamentos teóricos que sustenten la elaboración de
un modelo pedagógico para la formación de pregrado, como primer
resultado del proyecto de investigación Modelo pedagógico acorde con las
demandas del siglo XXI para la formación de profesionales en la
Universidad de Artemisa, concierne la caracterización del modelo
pedagógico predominante en la etapa inicial de la investigación que
actualmente se realiza en la citada universidad, para lo cual los principales
referentes que sustentan el estado deseado están en total correspondencia
con las bases establecidas en los fundamentos elaborados.
La caracterización del modelo pedagógico predominante se efectuará a
través del diagnóstico del estado inicial de la variable y los resultados que
de él se deriven permitirán la elaboración del modelo pedagógico que,
sustentado en los fundamentos teóricos establecidos, propicie las
transformaciones necesarias en el proceso de formación de pregrado, para
lograr el egreso de los profesionales que la sociedad cubana del siglo XXI
requiere, como estado deseado.
En la investigación se identificó como variable al proceso de
formación de pregrado y se definió conceptualmente como: proceso
pedagógico, con énfasis en el proceso de enseñanza-aprendizaje en una
carrera universitaria, basado en un enfoque teórico que posibilite la
realización de las transformaciones necesarias, para lograr el egreso de
profesionales que demanda la sociedad cubana del siglo XXI. Esta
definición conceptual evidencia su naturaleza compleja, todo lo cual
impone la necesidad de ser operacionalizada para su posterior evaluación
a través de determinados instrumentos de medición.
Al respecto Pérez (2013), apunta que la definición operacional
posibilita explicitar los indicadores que permiten registrar el estado de la
variable que se ha definido conceptualmente, para obtener la mayor
información posible adecuándose al contexto.
En este mismo orden de ideas, refiere el autor que cuando están
presentes variables complejas, donde el tránsito de la definición
conceptual a su definición operacional requiere de instancias intermedias,
entonces se puede hacer una distinción entre variables, dimensiones e
indicadores.
Asimismo caracteriza a la dimensión como rasgos que facilitan una
primera división del concepto, o sea que son diferentes partes a analizar, o
diferentes direcciones de análisis del proceso. Por otra parte, se refiere al
indicador como conjunto de rasgos perceptibles que posibilitan una
referencia empírica al concepto, es como se manifiesta externamente la
característica o el atributo, lo que posibilita su registro.
Como definición operacional de la variable proceso de formación de
pregrado se precisa que es el grado de coherencia del proceso de
formación de pregrado a partir de la relación entre la concepción del
profesional universitario a formar y el proceso de enseñanza aprendizaje,
teniendo en cuenta lo normativo y su concreción práctica, que potencie el
egreso de los profesionales que requiere la sociedad cubana del siglo XXI
(Rodríguez, A. y otros 2016).
Todo instrumento de medición debe resumir dos requisitos esenciales:
validez y confiabilidad, la validez indica la revisión de la presentación del
contenido, el contraste de los indicadores con los ítems que miden la
variable correspondiente y la confiabilidad indica la condición del
instrumento de ser fiable, es decir, de ser capaz de ofrecer en su empleo
repetido resultados veraces y constantes en condiciones similares de
medición. Para determinar la confiabilidad y la validez del instrumento de
medición es necesario realizar una prueba piloto a una muestra
seleccionada. Este proceso de validación es relativamente complejo y
requiere el conocimiento teórico claro de los aspectos que se quieren
medir, así como poseer conocimientos estadísticos avanzados y saber
operar programas informáticos para realizar los análisis estadísticos.
Hacia esta dirección está encaminado el presente artículo en el cual se
revelan los procedimientos que permitieron adjudicar validez y
confiabilidad a un instrumento de medición y se exponen los análisis
estadísticos que evalúan su consistencia interna.
2. Materiales y Métodos
La metodología utilizada se basa en la vinculación de los métodos del
nivel teórico con los del nivel empírico y los estadísticos. Como método
del nivel teórico se empleó el analítico-sintético. Como métodos del nivel
empírico se emplearon el análisis documental y la encuesta y como
métodos estadísticos se utiliza la estadística descriptiva para procesar
cuantitativamente los datos obtenidos mediante la aplicación de la prueba
piloto. Además, se utilizó la estadística inferencial a partir del empleo del
Coeficiente de Correlación Multidimensional rpj, procedimiento lógico
aceptado por la Teoría Clásica de los Test para determinar la confiabilidad
y el grado de consistencia interna del instrumento de medición elaborado:
Cuestionario de encuesta a estudiantes.
3. Resultados
El proceso de validación y confiabilidad de un instrumento de
medición ha sido experimentado por diversos autores, tanto en el ámbito
nacional como internacional, entre los que se destacan Hidalgo (2005);
Prieto y otros (2010); Hurtado (2012) y Pérez (2015). Estos académicos
reconocen que la aplicación de un enfoque inadecuado de la medición
puede generar datos inapropiados. De esta manera, consideran importante
que el investigador desarrolle instrumentos de medición adecuados.
Asimismo coinciden en que es recomendable, aun cuando se busca
que los instrumentos de medición no sean una carga para aquellos que los
contestan, es decir, que sean breves, eso no es pretexto, para impedir el
desarrollo de un instrumento confiable y válido. Un instrumento que cubre
estas últimas características, aunque no lo conteste un elevado número de
sujetos, proporciona mayor información, que un cuestionario breve, pero
ni confiable, ni válido. Al no ser confiable, ni válido, no es posible
determinar el significado de los datos, lo que hace que la cantidad de
información recopilada no sea relevante.
Un instrumento de medición tiene un grado alto de confiabilidad si es
afectado mínimamente por elementos que representan el error de
medición aleatorio. En este sentido, la confiabilidad tiene un matiz
plenamente empírico, sin embargo, dicho instrumento para una aceptación
científica completa, requiere de la validez.
El aspecto a enfatizar con respecto a la validez, consiste en saber si el
instrumento validado, realmente lo es, con respecto al propósito con el
que fue planteado. De esta manera, se trata de establecer, si la validez
permite interpretar los datos, con el fin con el que se planearon.
En este sentido Hidalgo (2005) considera que la validez y la
confiabilidad son constructos inherentes a la investigación, desde la
perspectiva positivista, con el fin de otorgarle a los instrumentos y a la