1. Introducción
La pandemia de COVID-19 inició en Wuhan-China, este hecho alertó
desde inicios del año 2020 a todos los países del mundo, a mediados de
febrero llegó a Latinoamérica, a partir del 16 de marzo se decretó el Estado
de Excepción en Ecuador para implementar una serie de medidas que
eviten la propagación del virus.
En la actualidad el Ecuador enfrenta: déficit fiscal, sectores
productivos parcialmente paralizados, incremento de la deuda pública,
inestabilidad económica, inestabilidad sanitaria y el más grande de todos
los males; el miedo a ser contagiado y morir.
El problema central de esta investigación se basa en la paralización
temporal de los sectores productivos de micronegocios y de la
construcción, provocado por la pandemia COVID 19, trayendo como
efectos decrecimiento económico de los habitantes del cantón Manta,
cierre total de empresas, disminución de ingresos a las empresas,
incremento de índices de desempleo que para el año 2018 estaba en 3.7 y
para febrero 2021 creció a 5.7, desatando problemas sociales como
pobreza, delincuencia y subempleo (INEC, 2021).
En esta investigación se mostrará la evolución de la construcción
desde el año 2016 en que Manabí y Esmeraldas sufrieron un terremoto de
7.8 en escala de Richter que provocó afectaciones considerables, pero que
motivó a muchas personas a levantarse y reactivar sus negocios. La
construcción se incrementó de forma incesante, siendo una de las fuentes
generadoras de ingresos en toda la cadena de valor. No obstante, este
sector y los micronegocios productivos han disminuido su rentabilidad por
la pandemia de COVID-19, por la paralización durante varios meses en
los inicios del confinamiento.
Con el pasar del tiempo, el gobierno fue cambiando las políticas y
permitió la apertura de ciertos sectores económicos, entre ellos la
construcción que fue uno de los primeros en reactivarse desde mayo 2020,
cumpliendo con los protocolos de normas sanitarias y de bioseguridad.
Por ello, es importante investigar y plantear estrategias de reactivación
económica para poder salir de la crisis en la que está inmerso el país, y
lograr estabilizar las empresas que han sido afectadas.
El sector de la construcción ha sido clave para el desarrollo de otros
negocios, debido al vínculo con otros sectores, como la fabricación de
vidrio y aluminio; productos de cerámica; muebles de madera; cemento;
artículos de hormigón y piedra; sustancias químicas; plásticos y productos
metálicos, considerando que estos insumos son utilizados en las primeras
etapas de la construcción (Coronel et al., 2014).
Según Magdaleno (1999):
…la importancia que tiene el sector de la construcción en la
actividad económica ha sido justificada teóricamente desde
diversas perspectivas: el sector de la construcción ayuda a
explicar las oscilaciones cíclicas del producto total, la inversión
pública tiene un efecto positivo sobre la productividad del sector
privado, ya que existen inversiones en construcción que, aun
siendo necesarias para el desarrollo de la actividad económica
privada, solo resultan atribuibles al sector público
(infraestructura en general), la actividad tiene importantes
efectos multiplicadores sobre la economía en su conjunto.
La construcción demanda gran cantidad de mano de obra calificada y
no calificada, requiere profesionales con experiencia y entrenamiento
especializado (arquitectos e ingenieros para el diseño y monitoreo de la
obra), y también personal no especializado para que ejecute las obras. Por
su efecto multiplicador, este sector influye de manera directa e indirecta
en la generación de empleo, por cada puesto de trabajo generado, se crean
alrededor de tres en las áreas con las cuales se encadena como la
carpintería, electricidad, plomería y el transporte, entre otros (MIPRO,
2012). También impulsa el crecimiento de industrias de servicios de
maquinarias pesadas, producción y comercialización de productos
petroquímicos, materiales de construcción, entre otras (Acebo y Núñez,
2016).
Un sector importante en el desarrollo del cantón Manta ha sido el
inmobiliario, no solamente ha servido para la activación del sistema
financiero a través de plazas de trabajo que se generan, también ha
contribuido para que Manta se posicione como una ciudad con potencial
turístico, productivo y comercial.
Finalmente, es importante indicar que la población de la provincia de
Manabí ha crecido un 17 % aproximadamente en los últimos 10 años; y
31 % desde 1982; actualmente acoge a 1.369,780 habitantes, dentro de los
cuales casi el 16.5 % vive en Manta. Según el censo realizado en el año
2010, Ecuador tiene 14.483,499 habitantes y 4.654,054 viviendas, siendo
los departamentos el tipo de vivienda particular que más se incrementó,
de 9.1 % en 2011 a 11.7 % en 2010 (Rojas & Intriago, 2013).
La pandemia continúa y algunos establecimientos han abierto sus
puertas, pero necesitarán aplicar estrategias de reactivación frente a la
realidad actual.
Existen micronegocios que buscan generar ventas aplicando
estrategias de mercadeo a través de descuentos, sorteos, influencers, para
incentivar la compra en sus clientes, según Kotler y Armstrong (2007) “…
incentivos a corto plazo para fomentar la compra o venta de un producto
o servicio”, pero aun así no alcanzan los niveles esperados para
permanecer en el mercado.
En esta etapa el marketing digital también ha desempeñado un
importante papel. Este consiste en “el empleo de Internet como fuente de
publicidad y difusión con el fin de aumentar las ventas de los productos
ofertados” (Perdigón et al., 2018). Por su parte:
…el comercio electrónico es cualquier actividad de intercambio
comercial en la que las órdenes de compra/venta y pagos se
realizan a través de un medio telemático, los cuales incluyen
servicios financieros y bancarios suministrados por Internet. Es
la venta a distancia aprovechando las grandes ventajas que
proporcionan las nuevas tecnologías de la información, como la
ampliación de la oferta, la interactividad y la inmediatez de la
compra, con la particularidad que se puede comprar y vender a
quien se quiera y donde y cuando se quiera (Neilson, 2009).
Ahora bien, para poner en marcha una estrategia de marketing digital
es preciso que la empresa disponga de herramientas como es el caso de la
página web, el blog, las redes sociales, el SEO/SEM y la publicidad
digital, entre otras (Membiela y Fernández, 2019). Las redes sociales son
una de las estrategias más utilizadas por las empresas dentro del mundo
digital:
…nacen como una reunión de personas, conocidas o
desconocidas, que interactuarán entre sí, redefiniendo al grupo y
retroalimentándolo. Esta idea enlaza con la cultura de la web 2.0
que no es sino un nuevo modismo para tildar lo que antes
definíamos como “hacer algo en grupo” (Domínguez, 2010).