Nullius: Revista de pensamiento crítico en el ámbito del Derecho
e-ISSN 2737-6125
Publicación semestral. Edición continua. Año 2021, Vol. 2, No 1. pp. 15-27. (enero-junio, 2021).
Con base en el legado histórico de las tres revoluciones, en cuanto a avances en el derecho a la
educación,
a

continuación,

se

plantean

algunas

alternativas

educativas

en

clave

de

derechos,

que
contribuyan al Buen Vivir, en el contexto de desafíos educativos derivados del COVID-19.
a.
Acceso a conexión y dispositivos
La educación es un derecho humano y constitucional, es responsabilidad del Estado garantizar el
mismo. En la modalidad virtual, la única forma de acceder a este derecho es la conectivida d, por lo
tanto,
esta

debe

ser

gratuita

para

todas

y

todos.

Se

debe

dotar

de

dispositivos

básicos,

de

forma
equitativa, a quienes no dispongan. La primera condición de garantía de acceso a la educación virtual
es disponer de dispositivos conectados a internet.
b.
Formación de docentes
En lo que llevamos en pandemia, los docentes han sido quienes han sostenido la educación del
país, a pesar de la precariedad salarial (atrasos y recortes), sus necesidades formativas y desafíos de
la
educación

virtual.

En

lo

pedagógico-didáctico,

es

necesario

una

formación

de

docentes

que
responda a sus necesidades pedagógicas cotidianas. La propuesta es programas de formación docente
en servicio, a través de estrategias metodológicas para investigar su propia práctica y mejorar, tales
como
comunidades

de

aprendizaje,

lesson

study;

recurriendo

a

modelos

como

Technological
Pedagogical
Content

Knowledge

(TPACK),

Bring

Your

Own

Device

(BYOD),

blended

learning,
entre
otras,

que

involucran

el

desarrollo

de

competencias

tecnológico

educativas

básicas.

En

lo
pedagógico-social,
los

educadores

requieren

miras

más

amplias

del

contexto

socioeducativo,

los
actores y roles de la educación virtual.
c.
Modelo educativo contextualizado históricamente
La pandemia ha desplazado gran parte de los momentos, espacios y escenarios de aprendizaje a
lo
familiar

y

comunitario.

Esta

pandemia

puede

ser

la

oportunidad

para

pensar

en

coeducarnos,
estudiantes, familias, docentes y directivos, en temas trascendentales para la vida, para afrontar la
situación
de

crisis

de

cara

al

escenario

socioeducativo

de

pandemia

y

postpandemia.

Algunas
preguntas que podrían orientar un pensamiento pedagógico para afrontar la crisis y sus secuelas son:
¿Quiénes aprenden y con quiénes? ¿Cómo, con qué, cuándo, en dónde, para qué se está aprendiendo?
¿Cómo viven unos y otros la crisis? ¿Quiénes son más vulnerables, más expuestos? Es necesario un
modelo educativo basado en un pensamiento pedagógico de acompañamiento a las familias.
d.
Pedagogías familiares y comunitarias
De forma urgente necesitamos resignificar lo educativo, que está ocurriendo en situaciones de
aislamiento
y

restricciones,

sin

condiciones

pedagógico-didácticas

convencionales

para

enseñar

y
aprender. El rol de enseñar es o se espera sea asumido por la familia, que no ha sido formada para
ello
y

no

está

preparada.

Trasladar

el

estudio

de

lo

curricular

al

entorno

familiar

en

estado

de
aislamiento, desconcierto y vulnerabilidad social, no es lo mejor que puede hacer la escuela. Es el
momento
para

pensar

una

educación

plural,

con

roles

educativos

diversos

y

distribuidos

en tre

la
escuela
y

la

familia.

La

escuela

podría

orientar

para

que

las

vivencias

familiares

constituyan
provocaciones
para

aprender

a

vivir

de

formas

más equitativas,

justas,

dignas

y

humanas,

con

el
currículo como un insumo provocador, mas no un fin en sí mismo.
e.
Desburocratizar la gestión docente y directiva
Directivos y docentes son los actores fundamentales de la calidad educativa. Los directivos están
sobrecargados
de

lo

burocrático

administrativo,

y

la

mayoría

no

tiene

la

suficiente

formación

en
nuevos liderazgos e innovación para la gestión pedagógica. Es necesario reconfigurar el rol tutorial
del
docente

como

acompañante

en

el

aprovechamiento,

adecuación

y

creación

de

escenarios,
situaciones y provocaciones para que los aprendizajes ocurran en climas familiares, de cooperación